A la hora de tomar una fotografía debemos pensar en el mensaje o emoción que deseamos transmitir con ella. ¿Cuantas veces hemos visto fotografías que no transmiten nada? Esto ocurre porque cuando la imagen fue capturada el fotógrafo no tenía ningún propósito en mente, solamente vio una escena y capturó la foto.
Para que nuestras fotos puedan transmitir una idea o emoción es necesario que tomemos en cuenta varios factores. Cuan mejor comprendamos estos factores, más posibilidades tenemos de hacer llegar el mensaje.
Vamos a explicar algunos de los factores más importantes a la hora de decidir como vamos a componer.
El centro de atención
Parece obvio este punto pero seguro ya tenemos la experiencia de que hemos ido de viaje a algún lugar interesante y al mirar las fotos que tomamos nos damos cuenta de que muchas de ellas las podemos desechar porque no inspiran interés alguno. Esto ocurre porque cuando tomamos la fotografía no buscamos un centro de interés que se convirtiera en el punto focal de la imagen, en aquello que el ojo por reflejo busca al observar la fotografía. Para evitarlo, definamos que es lo más interesante de la escena para posicionarlo adecuadamente dentro del encuadre.
El movimiento
Si deseamos capturar un momento único como el galopar de un caballo o el caminar de peatones por una avenida, debemos ubicar nuestro centro de atención en los lugares indicados para dar la sensación de que el sujeto se desplaza en la escena. Aunque no es una regla absoluta, generalmente las esquinas del encuadre son las más apropiadas para ello.
Si deseamos dar aún mayor fuerza a nuestra imagen buscando dar la impresión de que el objeto se acerca o aleja de nosotros podemos incorporar la técnica de profundidad de campo.
La velocidad
Esta herramienta es profundamente valiosa pero poco utilizada cuando nuestra experiencia en la fotografía es escasa. La velocidad puede darnos la sensación por ejemplo de que fotografiamos un vehículo detenido en el medio de la calle o que este circula a una gran velocidad.
Igualmente podemos utilizar una velocidad lenta en la cámara para dar la sensación de tranquilidad y relajación en una fotografía a las olas del más que irrumpen en la orilla o en el caer de una cascada.
Para modificar la velocidad en nuestra cámara es necesario que ella permita un ajuste manual de la velocidad de obturación. Los tiempos cortos son superiores a 1/60 segundos, permaneciendo abierto el obturador durante muy poco tiempo. De esta forma se consigue congelar la escena. Cuando por el contrario ajustamos el obturador a tiempos más largos, de decir, inferiores a 1/60 segundos, el obturador permanece abierto más tiempo y se consiguen imágenes movidas con una sensación de desplazamiento. Es recomendable utilizar un trípode al hacer fotografía con una exposición larga.
La escala promedio de tiempos suele ser:
| Valor | tiempo de equivaloracion del disparador |
|---|---|
| B o Bulb | Diafragma abierto mientras se mantiene pulsado el disparador |
| 30" | 30 s |
| 15" | 15 s |
| 8" | 8 s |
| 4" | 4 s |
| 2" | 2 s |
| 1" | 1 s |
| 2 | 1/2 s |
| 4 | 1/4 s |
| 8 | 1/8 s |
| 15 | 1/15 s |
| 30 | 1/30 s |
| 60 | 1/60 s |
| 125 | 1/125 s |
| 250 | 1/250 s |
| 500 | 1/500 s |
| 1000 | 1/1000 s |
| 2000 | 1/2000 s |
| 3000 | 1/3000 s |
| 4000 | 1/4000 s |
El color
Una imagen y dos versiones distintas de la misma modificando el color puede dar sensaciones totalmente diferentes. Los colores azulados y verdosos tienden a transmitir frío y los rojos y naranjas calor. De la misma manera podemos utilizar los colores fríos para transmitir melancolía y tristeza y los colores cálidos para el romanticismo y ternura.
Los ajustes de color pueden ser modificados en nuestra cámara fotográfica antes de tomar la fotografía a través del balance de blancos o temperatura de color el cual puede variar de entre 2500 K a 15000 K dependiendo del equipo del que dispongamos.
Esta pequeña tabla nos permite comprender mejor los valores aproximados de los grados Kelvin en relación con nuestro entorno natural
- 2700 K: hasta los 10000 K: Luz Fluorescente
- 2800 K: Luz incandescente o de tungsteno (iluminación doméstica)
- 3200 K: tungsteno para iluminación profesional
- 2700 K hasta los 10000 K: Luz Fluorescente
- 5500 K: Luz de día, flash electrónico
- 5780 K: Temperatura de color de la luz del so
- 9300 K: Pantalla de televisión convencional (CRT)
- 28000–30000 K: Relámpago
Si al momento de hacer la fotografía no realizamos ningún ajuste y nuestra última configuración de grados Kelvin era cercana a los 5500 K será muy sencillo utilizar algún programa de edición de fotografía como Lightroom o Photoshop para crear estas alteraciones durante la post-producción.
En otros artículos posteriores vamos a estudiar otras técnicas como el dinamismo, la monotonía, las lineas, curvas y la repetición que nos ayudarán aún más a crear un lenguaje fotográfico.
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